El aire es imprescindible para nosotros vivir, si no respiramos, simplemente vamos a morir; pero, nadie quiere morir. Para no respirar tendríamos que obstruir las vías respiratorias, cubrir nuestra boca y fosas nasales, esa seria una forma de no recibir ese aire que necesitas o bien, sumergirte debajo del agua por largo lapso de tiempo, pero sabes bien lo que sucedería si pasas mucho tiempo sin el preciado aire.
Es posible, o mejor dicho seguro, que si usted es encerrado en un contenedor, un tanque o un cuarto sin aire, entrará en pánico y desesperadamente buscara una abertura o agujero por donde usted pueda recibir al menos un poco de ese aire que siempre tuvo a su alcance y que justo ahora valora y sabe lo imprescindible que es para vivir.
Al igual que el aire que siempre esta a nuestro alrededor, así está Dios en todas partes a nuestro alrededor, siempre a la espera de que le busquemos; pero nosotros no lo buscamos y no lo valoramos.
Dios es nuestro aire, nuestro aliento, nuestro respirar. Por mas que intentemos vivir sin el, no podemos, no hay manera. De ningún modo debemos esperar a estar acorralados, o desesperados para reconocer lo vital que es para nuestras vidas, no debemos esperar el ultimo momento, debemos reconocerle hoy, darle gracias por todo lo que recibimos y no culparlo de nuestros fracasos, cuando no le hemos invitado a formar parte de nuestras vidas, ahora es el mejor momento ¡Busca el aire!
Dios es nuestro aire nuestro aliento sin el no podemos vivir. Gen 2:7 …Y (Dios) soplo en su nariz aliento de vida y fue el hombre un ser viviente.
Aporte de: E.H.
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