domingo, 4 de abril de 2010

Influir por la palabra


La manera en que decimos las cosas determina el como influimos en los demás. Dicen que no es “Lo que se dice” sino “Como se dice” diferentes personas pueden decir la misma oración o frase con una connotación totalmente diferente. Por supuesto, usted tiene la libertad de decir lo que quiera y como quiera, pero, esto inherentemente no le da el derecho de mal influir sobre alguien aunque bien pueda. Aunque todos somos creación del mismo autor, lamentablemente si se quiere decir, no todos desarrollamos nuestras cualidades al mismo nivel, lo cual marca una diferencia y permite que unos puedan influir positiva o negativamente sobre otros. Pero ¿Podemos decidir en cuanto a como influir sobre los demás? ¡Por supuesto! Y esto es lo verdaderamente interesante tenemos esa “Libertad” como antes mencionaba y por medio de la cual podemos elegir, es ese libre albedrío que nos fue regalado.

¿Sabe usted que una simple palabra dicha de la forma correcta y en el momento oportuno puede cambiar drásticamente la vida de una persona? Pues así es, para bien o mal las palabras transforman vidas. En medio del dolor, del sufrimiento, de la desesperación y hasta de la alegría las palabras, nuestras palabras, pueden cambiar el escenario de la vida de alguien. Dice la palabra de Dios que la lengua a pesar de ser un órgano pequeño es capaz de crear grandes incendios. Santiago 3:5 Así también la lengua es un miembro pequeño, y sin embargo, se jacta de grandes cosas. Mirad, ¡qué gran bosque se incendia con tan pequeño fuego! Y es la lengua la que emite las palabras que hay en nuestro corazón y “ De la abundancia del corazón habla la boca” Mt 12:34 Nosotros podemos establecer un cambio en nuestro proceder y manera de influir, si nuestras palabras son agradables y con la intención de brindar beneficio a quien la escucha el cambio en la vida de los demás y de nosotros mismos será notable. “La palabra blanda aplaca la ira” Proverbios 15:1 y si que es cierto.

No tengo experiencia probada en ciertas cosas de la vida, no soy terapeuta, psicóloga, trabajadora social u otra cosa y si tuviera que decir lo que soy perdería mi tiempo, porque más que las cualidades que pueda destacar, yo “soy lo que doy” y eso se puede aplicar a su vida. Determine ¿Qué usted es capaz de dar? y entonces sabrá quien usted es, claro, esto no es una teoría probada ni nada de eso, es solo una percepción de alguien a quien la vida le cambio por lo que alguien le dio y por la manera increíble e incomparable como esa persona influyó positiva y definitivamente en su vida. Y ha influido en la vida de millones durante siglos, así es, ese es JESUS, el ha influido sobre esta tierra en la vida de las personas como ningún otro. Y para que mencionar el amor que proyecta en su hablar, y las cualidades que posee, ciertamente este escrito no seria suficiente para explicar lo que su palabra ha hecho en mi. El es la mejor forma de ser influido, cambiado y salvado.

Y me resta decir que tal vez o mas bien con seguridad no influiré en su vida de igual manera, pero puedo decirle las maravillas que El es capaz de hacer por amor a usted, solo para que su vida mejore. Y después de aquí (este mundo) le pueda ver y juntos celebrar las maravillas y abundancia de bendiciones que nuestro Dios nos ha preparado.

Dios esta aquí, ahora, pídele de corazón que cambie tu vida y estoy totalmente segura, sin ningún temor a equivocarme de que El lo hará.

Que tu vida sea grandemente bendecida!


E.H.

1 comentario:

Anónimo dijo...

muy bueno este artículo.
Indiscutible que las palabras influyen en nuestras vidas y relaciones. Que El Señor nos de el don de la palabra para su gloria.