Si tan solo

Si tan solo supiéramos lo mucho que vale lo que nos cuesta poco. Que ceder el paso no es quedarnos atrás aunque eso parezca, que una sonrisa no requiere esfuerzos cuando es genuina. Que la amargura no podría tener mejor nombre, pues solo nos echa a perder la vida. Que la vida es como un rompecabezas con miles de piezas y que debemos saber escoger las que verdaderamente encajan para formar nuestra felicidad.

Nos ocupamos tanto en sufrir que llegamos a desconocer lo dulce de vivir. y aunque no es tarea fácil pasar por este mundo, sabemos que no somos los únicos, todos debemos completar este trayecto.

No estamos listos para muchas cosas y no podemos hacer todo a una, no podemos odiar y amar a la vez; no existe un pequeño odio, existe el odio y punto, llega grande y se extiende en nuestro corazón y nos desvela, nos hiere y duele. Por lo contrario el amor aparenta llegar pequeño como una semilla y crece y crece y llena nuestras vidas, da paz y nos revitaliza.

¿Que tan ocupados estamos, que no podemos sacar solo segundos de nuestras horas para construir nuestra felicidad? Así es, no es necesario construir la felicidad día a día, segundo a segundo, poco a poco y para siempre, es mucho mejor. Acabo de decir un te quiero y es maravilloso lo que se siente e imagino lo que siente quien recibe estas palabras o gesto de cariño.

Que tu tiempo sea para dar, servir no es una obligación, servir es un regalo, no para quien lo recibe sino para quien sirve, Jesús dijo: Como el Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos. Mt. 20:28. Servir produce un bienestar.


Estamos muy ocupados para ver lo que tenemos y por lo tanto, solo miramos, solo le echamos un vistazo a las cosas que nos rodean. La vida, nos pasa de lado. No estamos viviendo, estamos corriendo y lo peor es que no sabemos a donde. Aprendí a no quejarme de la lluvia cuando no tengo paraguas y estoy varada, en lugar de quejarme veo y disfruto el hecho de que Dios nos de una regadita.

La desesperación nos destruye, ya que desesperación es, la perdida total de la esperanza. Pienso que no hay vida si no se tiene esperanza, la esperanza es el estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos.

O sea que sin ella nada es posible. Es como la fe, imprescindible, y si hablo de esperanza y de fe, debo hablar de JESUS ¿Por que? Porque el es nuestra única y verdadera esperanza, a través de el definimos lo que somos y hacia donde vamos, a través de el sabemos que todo, absolutamente todo es posible y que mucho de ello depende de la fe, fe en el y en nosotros, tener confianza en que nuestro Dios nos dio las cualidades justas y necesarias para poder lograr y cumplír nuestros anhelos.

Amate, para que puedas amar. No se puede dar lo que no se tiene, tu eres tu mayor responsabilidad, cuando entendemos esto la perspectiva cambia, Facundo Cabral dice que "...Dios puso una persona a nuestro cargo y somos nosotros mismos..."

Vive la vida, no solo pases por ella, deja un legado, no todo se trata de cosas materiales, amate y ama, no importa lo que digan. Sonríe, no permitas que pase un día sin que sonrías, canta una canción no importa como creas que te escuches. Y por favor se inteligente no te conformes a lo que ofrece este mundo...

Y no os conforméis á este siglo; mas reformaos por la renovación de vuestro entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos 12:2

E.H.